El concepto mezzanine proviene del italiano mezzanino, que literalmente hace referencia al nivel intermedio entre un piso y otro dentro de un edificio. Dentro del mundo de los préstamos, su significado es bastante similar.
La deuda mezzanine, también llamada capital mezzanine o mezzanine financiacion, es una estrategia híbrida que se encuentra entre la deuda y el capital, pues obtiene un retorno parecido al del segundo pero en cuanto a la estructura de pagos, prioriza a los accionistas.
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¿Qué es la deuda mezzanine?
La deuda mezzanine es un tipo de financiación híbrida que se utiliza para complementar una deuda, es decir, para cubrir una parte del importe que los bancos no financian, y a la vez sirve para disminuir las cantidades que aportan los socios en un negocio, por lo que reducen de esta forma su nivel de riesgo.
En resumen, se considera una forma de financiación híbrida porque se clasificaría entre la deuda senior y el capital propio en la estructura de capital de una empresa.
Características de la financiacion mezzanine
La financiación mezzanine es un tipo de financiación híbrida que se suele utilizar en entornos en los que las posibilidades de la banca tradicional no son suficientes. Las principales ventajas de utilizar este tipo de financiación son:
- La deuda mezzanine no necesita una calificación crediticia pública, por lo que los trámites en este tipo de crédito son más ágiles y confidenciales, por eso es una opción idónea para las empresas.
- Es temporal. Esto quiere decir que los acuerdos se realizan marcando un periodo de tiempo fijo, ya sea corto o largo. La cantidad puede ser variable, pero siempre se determina en el contrato.
- Se puede devolver la deuda mezzanine antes de tiempo si resulta conveniente. Es decir, si se genera suficiente dinero y se quiere zanjar el contrato antes de la fecha de vencimiento estimada, no hay ningún problema.
- El deudor tiene más control durante el crédito. En este tipo de contrato, no es necesario ceder el control y perder el poder de decisión. Además, los ratios financieros son más desahogados.
- Son ideales para empresas medianas que desean establecerse objetivos y mejorar su posición financiera, compitiendo con los grandes de su sector.
Usos de la deuda mezzanine
La deuda mezzanine se puede utilizar por empresas para financiar distintos proyectos, generalmente compras y estrategias de crecimiento. Principalmente, se suele utilizar para:
- Para adquirir nuevos activos: maquinaria, equipos, propiedades, etc. Comúnmente, esa deuda se solicita para financiar este tipo de proyectos.
- Para llevar a cabo estrategias de expansión de la empresa: el crecimiento suele tener un precio bastante amplio, tanto si se trata de la compra de una empresa como una inversión externa.
- Para lanzar productos o servicios: tanto para la investigación como para el desarrollo o creación del producto en sí.
- Para financiar la reorganización de la empresa: una reestructuración, la optimización de ciertos aspectos, etc.
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